sábado, 14 de mayo de 2011

Esta es una entrada interactiva

Entrada interactiva para el fin de semana. Voy a escribir una oración, y la idea es que en cada comentario dejen una oración más de lo que será (si participa la suficiente cantidad de gente) un pequeño relato. Pueden dejar la cantidad de oraciones que quieran, pero dejen pasar un par de comentarios en el medio.
El miércoles subo el texto en una entrada nueva (también pueden subirlo en el blog de ustedes) y agrego la oración final (me doy el lujo de empezar y terminar, y quizá meter algun bocadillo en el medio).

Saludos, y gracias como siempre por pasar, leer, y comentar.

La oración es: "Puedo respirar alegría, pero no oler un color."

11 comentarios:

  1. "A diferencia de la alegría, los colores siempre me fueron esquivos, no sólo a mi olfato, a todos mis sentidos"

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  2. "Y así me paso noche y día, oyendo colores sin melodía, palpando colores sin textura, pero aún así la alegría perdura"

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  3. No sé si perdura, o lo quiero imaginar. El color más fuerte, es el de tu alma... (lo podrás imaginar)

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  4. Y aunque no pueda olerla por ser un color, respiro de ella la alegría de saber que estás a mis pies.

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  5. O en mis pies, tal vez, pues estás en cada paso mío, en cada roce, en cada espera, y hasta en esos colores huidizos -siempre delante mío, horizonte posible.

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  6. "Y como todo horizonte, perdido e inalcanzable, que se corre con mis pasos yo camino derecho, tratando de oler el color de tu alma, con una alegría tonta, falsa quizás, que parece ser todo lo que me queda."

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  7. Pero no se hacerlo, ni siquiera oler el color de mis lágrimas, a días verdes a días azules, en función de tu sonrisa de un naranja brillante.

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  8. fraseado de tintes bajos
    con una puerta de agua y una ventana tapiada;
    asi de solo ceno un domingo.

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  9. Es que el color de la alegría es inodoro e incoloro. Abrazos.

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  10. La tristeza, por otro lado, se viste siempre de colores fuertes.

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  11. Pero que con tu compañía facilmente se disuelven de nuevo en el color de la alegría.

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