Sinopsis de los capítulos anteriores:
El Dr. French, científico que trabaja en un laboratorio que está lanzando el Proyecto Oídos, se ve envuelto en un misterio. El Grupo Nuevo Aire quiere destruir el proyecto a toda costa a pesar de que este parece inofensivo y beneficioso para toda la humanidad. La decisión de los directivos es la de, por seguridad, cerrar las puertas del laboratorio… con todos adentro. El Dr. French y Bernardo, su jefe, intentan mientras tanto descifrar los mensajes en código que les dejaron unos misteriosos visitantes nocturnos.
Resultado de la última votación:
El laboratorio: cuenta con comodidades pero solo por un tiempo limitado.
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En la sala nos explicaron cómo íbamos a organizarnos. Habían improvisado unas seis habitaciones en las que dormiríamos por turnos de a cinco personas. También por turnos tendríamos que bañarnos y cocinar. Íbamos a tener que adaptarnos a esta nueva situación.
-El problema- dijo Álvarez- es que sólo tenemos víveres suficientes para quince días. El proyecto debe llegar a lugar tal que avance autónomamente, sin más trabajo nuestro, antes de que pasen estas dos semanas.
- ¡Eso no es posible!- gritó una mujer- deberíamos trabajar veinte horas diarias para alcanzar algo así, y aún así sería difícil…
- Puede ser- siguió Álvarez- que parezca algo imposible de lograr. Pero debemos hacer el intento: trabajaremos lo que sea necesario. El Proyecto lo vale. Aunque a veces parece que las cosas salen todas al revés…
Siguió hablando, pero yo ya no lo escuchaba. ¡Al revés! Eso era. Miré a Bernardo para transmitirle mi idea, pero él había tenido la misma. Miraba fijo su papel, sonriendo. El misterio comenzaba a develarse.
Me lo alcanzó. "Suénele bajo ralas” era “Sala roja, Belén Eus”. Aunque no sabía qué podía encontrar allí, cosa que me preocupaba demasiado, mi curiosidad estaba empezando a poder más que todo. Bernardo y yo nos levantamos al mismo tiempo y, a pesar de las protestas de los demás, nos fuimos de nuevo del salón. La sala roja, la sala donde se encuentra la base de datos del Proyecto, nos esperaba. Y Belén Eus sería quién finalmente nos dijera quienes eran el grupo Nuevo Aire, y qué tenían en contra del Proyecto Oídos.
.........................................................................................Belén Eus es:
1- Una empleada subestimada, pero muy inteligente.
2- Una ex-empleada.
3- Una computadora a la que los empleados nombraron en chiste.
4- Otro (proponer).
Sobre la dinámica del relato interactivo:
ResponderEliminarTodas las entradas tienen una pequeña encuesta al final en la que cualquiera puede votar. La última opción va a estar siempre abierta a otras propuestas que también se someten al voto. Esta historia, así, se va definiendo en interacción entre lector y escritor.
A cada entrega se le suma una sinopsis de las entregas anteriores, para refrescar la memoria a los que ya la leyeron y para invitar a los nuevos lectores a participar.
Si les gusta una opción que surgió después de su voto, pueden cambiarlo sin problemas.
Opción 1 totalmente. Belén es, incluso alguien a quién cualquier persona no prestaría ni la más mínima atención; sin embargo, vaya sorpresa es descubrir que sabe mucho y su inteligencia supera a la de unos cuantos *
ResponderEliminarMi humilde opinión. Nada más.
Un beso o 2 #
Concuerdo con Eleanor, opción 1!
ResponderEliminarEsta vez quiero formar una oposición seria y razonable, que no por eso escatimará esfuerzos para alcanzar la mayoría.
ResponderEliminarElijo una opción cuatro o 4 o IV: BELEN EUS es una ex Integrante del grupo nuevo aire, que debido a la corrupción de sus altos mandos se desencantó con el grupo; pero no por eso concuerda con el Proyecto Oídos. No obstante sabe que el protagonista no está enterado de todas las implicancias de dicho proyecto, y en algún lugar de su interior está persuadida que puede convencerlo de boicotear la operación.
Esta buenísima historia, un gran abrazo Lucas.
Posdata: Gracias por el anagrama, sin dudas que ésta es una historia interactiva, me encantan los anagramas y esta semana venimos de parabienes entre palíndromos y anagramas. De algún modo siempre un palíndromo es un anagrama. Me acabo de dar cuenta de eso, me siento como Fleming cuando descubrio la Penicilina; bueno, quizás tengo un día exagerado.
4.- Creo que es el nombre de la sala roja en código.
ResponderEliminarSaludos cordiales.
No sé, no sé... Va, voto por la opción 4 de Juan.
ResponderEliminarAbrazo!
Iba a decir que me gustaba la opción 1. Pero a último momento decidí leer los comentarios para ver como iban las cosas. Y la opción 4 propuesta por Juan está mejor. Me uno a esa.
ResponderEliminarhttp://idasueltas.blogspot.com/
Giros inesperados, muchos giros inesperados. Me gusta el rumbo que se está tomando; sea cual sea.
ResponderEliminarYo voto por la propuesta de Juan, sin duda.
¡Saludos!
¡Gracias a todos por sus votos! Esto toma vida gracias a sus aportes.
ResponderEliminarPor ahora...
Opción 1: 2 votos.
Opción 4 (Pluma Roja): 1 voto.
Opción 4 (Juan ojeda): 4 votos.
como una vez le comenté a mi maestro Juan Ojeda, en esta época en la que por fin tenemos la oportunidad de compartirnos, por fin autor y lector pueden interactuar sin jerarquías, hasta igualarse. Un abrazo y gracias por tu visita
ResponderEliminarParece que me he perdido de algo, mas ya me actualizaré. De momento, sirva la amenaza de quedarme en tu Be Corta y participar "en lo posible" con tus propuestas. Finalmente, y con lo poco que he comprendido, apoyo la opción 4 y a nuestro escritor Juan Ojeda.
ResponderEliminarUn abrazo.
apoyo la 4. Es un buen giro a la intriga
ResponderEliminarLucas, me gustó mucho el relato, muy interesante y distinto.
ResponderEliminarMis más gratas felicidades :D